A través del consumo de alimentos contaminados se pueden contraer diferentes enfermedades bacterianas como es el caso del botulismo.
Las principales normas que ayudan a controlar y minimizar el riesgo específico de intoxicación por clostridium botulinum son las siguientes:
- UNE-CEN ISO/TS 17919:2013. Microbiología de la cadena alimenticia. Reacción en cadena de la polimerasa (PCR) para la detección de patógenos en los alimentos. Detección de clostridias productoras de neurotoxina botulínica de tipo A, B, E y F.
- DIN 10102:1998-06. Análisis microbiológico de carne y productos cárnicos. Detección de Clostridium botulinum y toxina botulínica.
También, sirven de apoyo otras normas sobre microbiología de la cadena alimentaria para la toma de muestras en general como, por ejemplo, la UNE-EN ISO 17604:2015 y la ISO/TS 17728:2015.