Las
normas UNE son la herramienta perfecta para
prevenir y controlar la legionella, una bacteria de efectos nocivos que cada año aparece en escenarios con un denominador común, el agua. Esta bacteria puede aparecer en edificios o instalaciones con aires acondicionados, torres de refrigeración o cualquier tipo de reserva de agua.
En este sentido, ponemos en valor las normas
UNE 100030:2017 y la
UNE-EN ISO 11731:2017 que ayudan a prevenir y controlar la proliferación y diseminación de legionella en instalaciones y que buscan mantener la calidad del agua con el recuento de la misma.
Ambas normas están citadas en el
Real Decreto 865/2003, de 4 de julio, por el que se establecen los criterios higiénico-sanitarios para la prevención y control de la legionelosis.
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